Estamos en una época donde ser multifacética, multitareas, tener la capacidad de asumir múltiples responsabilidades, es sinónimo de mujer empoderada, exitosa, un modelo a seguir.

Este es un tema al cual le he dedicado muchas horas de investigación, de reflexión y en el que seguiré trabajando e indagando.

Existen algunos elementos que caracterizan a la súper mujer y que quiero compartir contigo para que seas tú misma quien pueda reconocerse o no en este personaje.

Veamos lo que nos dice una reconocida psicoanalista venezolana, la Dra. Maritza Izaguirre: “Una de las características de la personalidad de la súper chica que más le hace trampa, es la omnipotencia la hace sentirse muy poderosa, todo lo puede no existe persona que lo haga como ella, pero vive sobre exigida tiene que hacer las cosas perfectas, la frustración la acompaña cuando en algún momento puede reconocer que no es perfecto, otra característica predominante es la que como mujer tiene los recursos para tener varios focos de acción atendidos y esto lo asume como supremacía. La súper mujer lo hace todo y no logra ver que no deja espacio, que no confía, que no delega en el otro, siempre dice: “lo hice yo”. Pero esta también es la queja: “siempre todo lo tengo que hacer yo”.

Uno de los arquetipos de Carl Jung que pueden ajustarse a la Súper Mujer, es el arquetipo del héroe, donde se caracteriza al sujeto que lucha por ser fuerte y defender a los demás. Sienten que tienen un destino que deben cumplir. Los héroes son competentes y valientes en su búsqueda de justicia e igualdad y se enfrentarán incluso a las fuerzas más poderosas con el claro objetivo de ayudar a los demás y proteger a los débiles. Temen ser percibidos vulnerables y su mayor debilidad es la arrogancia y la continua necesidad de librar una batalla tras otra

Este arquetipo es asumido de manera consciente o inconsciente. No en pocos casos, esta personalidad puede dejar a una mujer desahuciada, sin sentido de sí misma, sin poder.

Entre los elementos psicológicos presentes en la personalidad de Súper Mujer podemos mencionar:

1. Necesidad de aceptación y aprobación
2. Deseo de admiración
3. Controladora
4. Superioridad
5. Perfeccionista
6. Puede mostrar externamente un estado viviendo otro en el mundo privado
7. Contraataca para esconder o borrar las heridas a su autoestima
8. Fantasías de grandiosidad para compensar sus heridas
9. El ascenso hacia estatus más altos garantiza su buena autoestima
10. Sensible a la crítica y a los fracasos y al mismo tiempo proclive a la autocrítica, inseguridad e inferioridad.
11. Omnipotencia y narcisismo

Detengámonos en este último elemento. La omnipotencia está relacionada en la fase adulta con la megalomanía, donde la consciencia de sí mismo totalmente deformada y engrandecida se considera capaz de dominar el mundo, el YO se magnifica desmesuradamente. En el momento que se forman estados patológicos durante el desarrollo psíquico, la omnipotencia puede llegar a ser muy peligrosa porque te despoja del contacto con la realidad.

Explicado en párrafos anteriores, la omnipotencia es la creencia tácita o explícita de pensar que todo se puede. Con frecuencia, se confunde la omnipotencia con la soberbia. Incluso, se puede considerar de omnipotente a alguien que alardea de lo que puede, o lo que sabe, o lo que hace; pero no necesariamente esto se refleja en su accionar.

La condición de omnipotencia y el narcisismo

Los especialistas en este tema, explican que el comportamiento narcisista expresará una sobrevalorización o idealización del Yo, lo que provocará una actitud de desprecio y desvalorización de las demás personas. Este sentimiento de superioridad viene dado por la introyección de lo bueno y grandioso pudiendo generar una actitud controladora y de autoridad que no ha sido ganada por el logro personal, viviendo esta superioridad como un derecho omnipotente.

De este modo, todos los detalles deben pasar por una exhaustiva supervisión, en este caso de la Súper Mujer, ya que mantiene la creencia de que solamente ella posee la capacidad para desarrollar cualquier tarea eficazmente.

La evolución de este rasgo de autoridad exagerada si no se corrige, puede conducir a consecuencias no deseadas ya que la grandiosidad interior es esencialmente delirante.

Descalificar es la técnica favorita de quien posee rasgos omnipotentes y narcisistas. Se trata de una forma encubierta de superioridad, de expresar: “Yo soy mejor que tu” y consiste en rebajar una característica positiva y convertirla en neutra (sin valor) o negativa.

De allí que el juicio es un elemento fundamental que ejerce la Súper Mujer para devaluar los logros, enviar dobles mensajes, robar mérito, desaprobar, burlarse y hasta acusar falsamente.

Los expertos aseguran que la omnipotencia narcisista puede ocurrir en cualquier persona, incluso puede no percibirse. De allí la importancia de detenernos, de observarnos, de buscar un estado de calma interior que nos permita valorar nuestras virtudes y también nuestras limitaciones. Observar cómo y desde dónde establecemos nuestras relaciones con nuestro entorno y, sobre todo, cómo nos relacionamos con nosotras mismas. Tomate unos minutos y pregúntate: ¿Vivo sobre exigida? ¿Todo lo puedo? ¿Todos dependen de mí? ¿Si falto todo se derrumba?

Este es un tema extenso que trabajamos a profundidad en la capacitación El Rol de la Súper Mujer y que seguiremos abordando en Cita con tu ser interior, para que juntas aprendamos a transitar el camino lo más ligeras posible.